martes, 7 de diciembre de 2010

Argentina: Subdesarrollo?... País emergente?


por Juan Carlos Alarcon


Se habla mucho de las crisis económicas, de países subdesarrollados, de países en vía de desarrollo como mercados emergentes y de los países desarrollados, pero seamos claro, toda esta clasificación es parte de un mismo sistema capitalista atado al carro del imperialismo.
El 20 de enero de 1949, el presidente americano Harry Truman hizo referencia por primera vez al subdesarrollo. En realidad lo que hizo fue imponer un modelo de sociedad industrial occidental como referencia universal. La noción de “subdesarrollo” implica una jerarquía sobre la idea de que todos los Estados tienen necesariamente el crecimiento económico y la industrialización como principal objetivo. Todos deben seguir el ejemplo de Inglaterra en su evolución del siglo 18 y 19, lo cual supone aplicar las mismas políticas liberales favoreciendo la inversión privada y el comercio exterior. Es la manera de imponer una economía de mercado y que es empujada por las instituciones internacionales (OMC, FMI, BM, etc) obligando a los países en desarrollo activar programas liberales llamados de “ajustamiento estructural”. Argentina la aplicó al pie de la letra en la década del 90 produciendo el resultado de la crisis del 2002.
En realidad, con ese modelo lo que se busco fue de dar prioridad absoluta a la inversión capitalista y, por supuesto, que esa inversión llegara desde los países desarrollados. Harry Truman no fue tonto y todos los presidentes que le sucedieron en Estados Unidos aplicaron esa política imperialista, Obama incluido. Con los chimentos diplomáticos revelados por WikiLeaks se observaba que nada había cambiado, ya Napoleón aplicaba eso en sus estrategias militares de conocer las posibles debilidades del enemigo.
Con la política del subdesarrollo nos encontramos que “el bien estar” de un pueblo pasa por sus relaciones diplomáticas de sumisión y por la instalación de multinacionales en el mercado local. La Argentina no es una excepción.
Desde hace muchos años vengo diciendo que el capitalismo lleva la crisis en su vientre, esto ya lo vivimos nosotros en el 2002, lo vive Grecia e Irlanda, y países como Portugal y España también vienen haciendo malabarismo para que nos los manden a la banquina.
Los Kirchner aplicaron otra estrategia económica que las recetas dadas por el FMI y el BM estableciendo reglas de juegos fundado en un Proyecto Nacional. No se puede decir que sea una receta revolucionaria en términos ideológicos, pero si lo es en la humanización del bien material, en la redistribución de las riquezas y en la solidaridad que se le exige al mundo privilegiado de siempre. Este proyecto nacional creó de nuevo confianza de la sociedad en su dirigencia política y hasta favoreció a los políticos de todos los sectores opositores, porque desde aquel grito de la sociedad cuando el pueblo pedía “que se vayan todos” hoy no se fue nadie y es gracia a Kirchner que políticos de la oposición todavía estén en el escenario público.
La juventud que había sido avasallada por aquel sistema neo-liberal y que le había destruido el futuro empujándola hacia las embajadas para hacer colas interminables pidiendo visa y rajarse del país, hoy vuelve a ser capaz de soñar de nuevo que es posible tener un mundo mejor. Los Kirchner fabricaron esa esperanza. No solo que la juventud vuelve a creer sino que también quiere volver a participar activamente de la vida ciudadana del país.
Sin embargo el neoliberalismo y la economía de mercado que predominan en el mundo desarrollado no se quedó con los brazos cruzados, también adecuó sus estrategias de dominación y modificó los valores económicos y financieros. El actor principal ya no es el trabajo sino el dinero. El hombre más vale por lo que tiene que por lo que es, demostrando otra vez que la economía es también un problema moral que se debe tener en cuenta. Cristina Fernández de Kirchner denunció en el G20 la guerra entre las divisas, porque esa situación lleva a que las desigualdades sociales exploten. El mercado no es pacifico es agresivo y peligroso como se lo viene de ver con la crisis mundial y no se lo puede dejar que se regule solo.
Cristina Fernández de Kirchner en la inauguración de la XX Cumbre Iberoamericana de Jefes y Jefas de Estado en Mar del Plata dijo que la crisis global “exige que el modelo de funcionamiento de la economía sea revisado, repensado y que sea diseñada una nueva arquitectura global, económica, financiera y comercial, donde la asociación de los países esté basada en criterios de cooperación, de equilibrio y también de igualdad”. Tiene razón, es el Estado que debe controlar el capital y no al revés como se hacia antes. El Proyecto Nacional que ella encarna como presidenta de los argentinos está dando buenos resultado, la economía creció en un 8,5% y el desempleo volvió a bajar otro poco y ahora esta al 7,5% y hasta el control del gasto se va dando en función de los ingresos: lo dijo Clarín (25/11/10) y no Moreno.“El nivel de endeudamiento es –en promedio y en términos reales– un 13% más bajo que hace tres años”.

1 comentario:

Viva Kirchner! dijo...

buenisimo! Nestor y Cristina con sus políticas acertadísimas nos devolvieron la dignidad a los argentinos... CFK2011